En este artículo hablaremos sobre cómo elegir una cámara fotográfica que se adecúe al gusto de cada persona. Debido a que existen diversas cámaras, y eso lo convierte en una decisión difícil al momento de elegir una que se adapte tanto a las comodidades como al tipo de fotos que realiza el usuario. Cabe resaltar que los precios de las mismas son bastantes altos dependiendo de la marca, la calidad y el modelo elegido.
Por otro lado, en 1900 Eastman Kodak dio a conocer la cámara Brownie que era poco más que una caja de cartón con un objetivo y un rollo de película. Sin embargo, desde ese momento revolucionó el mundo de la fotografía. Algo que se fue potenciando gracias al apogeo del uso personal de las cámaras y al avance de la tecnología.
1. Cámaras de apuntar y disparar
La gama es muy amplia en estos tipos de cámaras fotográficas, asimismo sus principales características son ser compactas, asequibles y fáciles de usar. Del mismo modo, hay modelos avanzados con zoom largos, sensores grandes y controles manuales completos. Sin embargo, su principal desventaja es que el objetivo no se puede extraer de la cámara.
En los últimos años, la popularidad de estas cámaras ha disminuido considerablemente a medida que las cámaras de los teléfonos móviles han incrementado su calidad. Por ello, las cámaras básicas ya no son atractivas para el promedio de personas ni para los fotógrafos. Así pues, los fabricantes han concentrado sus esfuerzos en los modelos de gama alta.
Aunque se pueden encontrar algunas cámaras básicas en el mercado, estas no suelen ofrecer una calidad de imagen superior que la de un smartphone moderno. Sin embargo, ofrecen funciones que los teléfonos no suelen tener, como los objetivos con zoom.
¿Qué tipo de cámara básica comprar?
Para obtener una mejor calidad, es preferible elegir una cámara fotográfica compacta avanzada. Por ejemplo, las cámaras que utilizan un sensor de 1 pulgada, como la serie RX100 de Sony. Estas cámaras brindan al consumidor un sensor mucho más grande, aumentando la calidad de la imagen.
Otro tipo de cámara de apuntar y disparar es la superzoom de la Nikon P1000, llamada así por su objetivo de zoom extremadamente largo. Adicionalmente, cuenta con una potencia de 125 x, que equivale a una distancia focal de 24-3.000 mm. Una cámara de este tipo ofrece una gran flexibilidad de disparo en un paquete relativamente compacto.
Las cámaras robustas y resistentes al agua suelen tener una calidad de imagen inferior y unos zoom mucho más cortos que los de otras cámaras. No obstante, ofrecen tranquilidad a la hora de hacer algunas fotos en lugares riesgosos.
2. Cámaras sin espejo
Esta categoría ofrece una calidad de imagen superior, más opciones creativas y un rendimiento más rápido que las cámaras de apuntar y disparar. El nombre de “sin espejo” viene del hecho de que estas cámaras no tienen el espejo que se encuentra en una DSLR. Del mismo modo, tampoco tienen un visor óptico.
En su lugar, las cámaras sin espejo están siempre en modo de visión en directo, ya sea mirando la pantalla LCD o a través de un visor electrónico (EVF). Como consecuencia, suelen ser más caras, pero los modelos básicos suelen ser más baratos que las cámaras compactas de gama alta.
Formatos de las cámaras sin espejo
Existen diferentes formatos de cámaras sin espejo empleados por distintas marcas. En el caso de Panasonic y Olympus comparten el formato Micro Cuatro Tercios (MFT). Por otro lado, Fujifilm utiliza el sensor APS-C de mayor tamaño para sus modelos de la serie X y Sony fabrica cámaras sin espejo con sensores APS-C y de mayor tamaño (35 mm). Igualmente, Canon mantiene su línea EOS M que utiliza el formato APS-C.
Al elegir este tipo de cámara fotográfica, se detalla que tienen al menos 20 megapíxeles, lo que es considerado bueno para la mayoría de los fotógrafos. En cambio, si se desea maximizar la resolución, se tendrá que buscar sensores más grandes. Por ejemplo, la Sony A7R IV ostenta actualmente el récord de cámara de fotograma completo con mayor resolución, con 61 megapíxeles y la Fujifilm GFX 100, que utiliza un sensor de formato medio aún mayor, tiene 100 MP.
3. Cámaras DSLR
Las cámaras DSLR cubren el mismo rango de precios que las cámaras sin espejo y abarcan la misma gama. Una DSLR de nivel básico ofrecerá una calidad de imagen alta en comparación con una cámara compacta. Sin embargo, al elegir este tipo de cámara fotográfica, se debe tener en cuenta que su sensor es más grande, por ende, no ofrecerá la velocidad y los extras de una DSLR profesional.
Las DSLR no ofrecen una mejor calidad de imagen o más versatilidad que las cámaras sin espejo, pero tienen otras ventajas. Como su visor óptico, esto hace que tengan una duración de batería superior, ya que consume poca energía. Por ello, una DSLR de gama media puede realizar más de mil exposiciones con una sola batería.
El mayor inconveniente de una DSLR es que son grandes y pesadas. También son malas para la grabación de vídeo (requiere live view). Como consecuencia, para los principiantes se recomienda una cámara sin espejo en lugar de una DSLR.
Encontrar el mejor precio
Lo ideal es que no tengas que gastar una fortuna para elegir la cámara fotográfica que se adecue a tus principios. Sin embargo, es importante tener en cuenta lo que necesitas. Debido a que, muchos de los modelos que tienen un precio elevado están cargados de funciones que quizá nunca utilices, pero que te permitirán crecer si piensas dedicarte a la fotografía como profesión.
Por otro lado, gastar demasiado poco en una cámara, puede resultar frustrante, puesto que no cumplirá con tus expectativas ni objetivos. Hoy en día, cuando los teléfonos inteligentes hacen tan buenas fotos, es difícil recomendar la compra de una cámara básica, a menos que se necesite para un propósito específico. Todo ello, depende si se desean resultados profesionales o invertir en un estudio de fotografía.
La importancia del sensor de la cámara
El tamaño físico del sensor es más importante para la calidad de la imagen que el número de píxeles. Por eso, una cámara de apuntar y disparar con un sensor de 1/2,3 pulgadas nunca estará a la altura de una DSLR con un sensor APS-C. Aun así, la cámara de apuntar y disparar tenga más píxeles.
Aunque hay factores de calidad subjetivos, como el control de la profundidad de campo, que provienen de los sensores más grandes, la principal razón de la mejora de la calidad es que un sensor más grande recoge más luz. En esa situación, habrá menos ruido en espacios de poca luz. En general tendrá un mejor color y contraste.
Ergonomía
La adaptabilidad es un elemento que no se tiene en cuenta al momento de elegir una cámara fotográfica. De la misma forma, asegúrate de que una cámara se adapte cómodamente a tu mano y que no sea tan pesada que no quieras llevarla contigo. La cámara que compres debe ofrecer una rápida accesibilidad a las funciones más utilizadas, y los menús deben tener una estructura sencilla, lógica y fácil de aprender.
Los modelos con pantalla táctil pueden permitir una experiencia de usuario superior y más fácil. Al mismo tiempo pueden ser frustrantes si los controles y menús están mal organizados o la pantalla no se puede calibrar al tacto. En detalle, esto es subjetivo, por lo que se recomienda probar diferentes modelos hasta llegar al adecuado.
Objetivos intercambiables
Una cámara que permite intercambiar objetivos ofrece diferentes opciones creativas para elegir. Aunque algunas cámaras de apuntar y disparar de gama alta tienen una óptica muy buena, no pueden competir con la versatilidad de los objetivos intercambiables.
La mayoría de las cámaras DSLR y sin espejo suelen venderse con un objetivo de kit básico. Junto con un zoom compacto y cómodo. Sin embargo, no demuestra realmente el potencial de los objetivos de la cámara. Cambiar un objetivo transforma literalmente tu perspectiva, y elegir uno es un tema que requiere experiencia.
Los que compran una cámara por primera vez suelen cometer el error de intercambiar los objetivos de otros modelos. En general, no se pueden cruzar las marcas, a menos que se utilicen adaptadores de terceros. La excepción es el Micro Cuatro Tercios, donde tanto Panasonic como Olympus fabrican objetivos que pueden montarse en cámaras de ambas marcas.
Estabilización de la imagen
La estabilización óptica de la imagen ayuda a eliminar el desenfoque de las fotografías mediante el desplazamiento físico de elementos dentro de los objetivos. Relativamente es útil para los objetivos de zoom largo, que pueden ser difíciles de mantener estables. Igualmente es el método preferido de las DSLR, aunque no todos los objetivos están estabilizados.
Mientras que la estabilización por desplazamiento del sensor, también llamada estabilización de la imagen en el cuerpo, o IBIS, mueve físicamente el sensor en respuesta a las vibraciones. Como consecuencia es el método de estabilización preferido de las cámaras sin espejo porque suelen adaptarse y tiene la ventaja de funcionar con cualquier objetivo.
Adicionalmente, la estabilización electrónica de la imagen (EIS), es un truco de la cámara. De ese modo, permite capturar una imagen menos borrosa, que conlleva una menor calidad de imagen. Por ejemplo, la cámara de acción GoPro Hero 8 Black se adapta a este método
Visores ópticos vs electrónicos
Los entusiastas de la fotografía prefieren el uso de visores ópticos al uso de una pantalla LCD ya que estos ayudan a centrarse en la toma e ignorar las distracciones externas. Asimismo, son perfectos a la luz del sol, cuando una pantalla LCD puede quedar deslucida.
Las cámaras DSLR cuentan con visores ópticos. Mientras que las cámaras sin espejo utilizan visores electrónicos (EVF), que contienen pequeñas pantallas LCD con un visor. Otro punto clave, es que las cámaras de apuntar y disparar no tienen EVF, ya que aumentan en tamaño y el peso, pero algunos modelos de gama alta sí lo tienen, como la Sony RX100 VI.
Los visores ópticos proporcionan una imagen clara y no agotan la batería. En cambio, los visores electrónicos ofrecen ver el efecto de tus ajustes de exposición y color mientras disparas, puedes hacer zoom para comprobar el enfoque y mostrar todo tipo de información.
Vídeo
Actualmente, al elegir una cámara fotográfica lleva consigo la opción de grabar vídeo, y muchas incluso lo hacen en resolución 4K Ultra HD. Las cámaras sin espejo y DSLR de gama alta ofrecen funciones de vídeo que incluso son adecuadas para la realización de películas. Así como mayores opciones creativas gracias a la selección de objetivos disponibles.
Se debe tener en cuenta la velocidad de los fotogramas. Por ejemplo, 24 a 30 fps es lo normal, 60 es bueno para una reproducción súper fluida o a cámara lenta. Cualquier cámara, desde las de apuntar y disparar, proporcionará un vídeo decente para usos ocasionales.
Cabe señalar que la característica más importante para un buen vídeo es la estabilización. Si no cuentas con un trípode, asegúrate de tener una cámara con estabilización de imagen en el cuerpo o un objetivo con OIS. Por lo tanto, garantizará un metraje suave y sin temblores en sus tomas de vídeo a mano.
Otras especificaciones para tener en cuenta
Modos de disparo
Las cámaras de apuntar y disparar de nivel básico suelen ofrecer una gran cantidad de modos de disparo, todos ellos con una versión del modo automático básico. Sin embargo, las cámaras compactas avanzadas y los modelos de objetivos intercambiables ofrecen un control mucho mayor sobre las imágenes con los modos de exposición manual. Aunque estas cámaras siguen incluyendo modos automáticos, para los que no se familiarizan en el manejo del ISO, la velocidad de obturación y la apertura de cámara.
RAW vs JPEG
El formato JPEG es el estándar principal para las imágenes. Por esa razón, la mayoría de las cámaras disparan en ese formato. En cambio, las cámaras de gama alta, especialmente los modelos de objetivos intercambiables, ofrecen la posibilidad de disparar en RAW. Dicho esto, las imágenes RAW registran toda la información del sensor de la cámara, sin desechar ningún dato como hacen las JPEG.
De ese modo, proporcionan flexibilidad en el trabajo de la postproducción. Por ejemplo, las sombras se pueden aclarar, las luces se pueden reducir, el balance de color se puede cambiar. En consecuencia, el formato RAW abre un nuevo mundo de posibilidades de edición.
Sin embargo, toda esa información adicional de la imagen tiene un costo en cuando a capacidad. Los archivos RAW suelen ser cuatro veces más grandes que un JPEG de alta calidad. Por ello, asegúrate de tener una tarjeta de memoria grande y espacio en el disco duro.
Wi-Fi y GPS
La conexión Wi-Fi es una característica imprescindible al elegir una cámara fotográfica moderna, dada la prevalencia de las redes sociales. Además, puedes compartir tus imágenes directamente en Instagram o Facebook sin tener que conectar la cámara al ordenador. La mayoría de los fabricantes lo incluyen en la mayoría de los modelos y cada uno tiene su propia aplicación para iOS o Android. De esa forma, conectan la cámara de forma inalámbrica y transfieren las imágenes.
Con respecto al GPS, no es una necesidad obvia para la mayoría de la gente. En ocasiones puede servir si se viaja mucho. Debido a que es útil para geoetiquetar las fotos y saber fácilmente dónde se tomaron. Cabe resaltar que cuando el GPS está activo, la batería de la cámara se agota mucho más rápido, así que no es bueno utilizarlo cuando no se necesite.
Resistencia a la intemperie, al polvo y a los golpes
En primer lugar, una cámara resistente a la intemperie implica que todas las costuras y botones han sido sellados para evitar la lluvia, la niebla y las salpicaduras ligeras, pero no sobrevivirá si se sumerge en el mar. En cambio, una cámara resistente al agua está diseñada para esas temperaturas. Por ello, si haces fotos de paisajes bajo la lluvia, se necesitará una cámara resistente a la intemperie.
Muchas cámaras sin espejo y DSLR de gama alta son resistentes a la intemperie, lo que las hace adecuadas para una amplia gama de fotografías en exteriores. Sin embargo, las cámaras de objetivos intercambiables de gama baja no suelen ser resistentes a la intemperie. Otro punto clave es que, si la cámara es resistente a la intemperie, pero el objetivo no lo es, podría tener problemas.
Conclusión
Si cuentas con un presupuesto limitado, necesitarás una cámara estándar para realizar tus fotografías. Para ello, asegúrate de adquirir características tales como; lente de zoom, resistencia al agua, etc. En cambio, si tu presupuesto es un poco más alto, pero quieres quedarte con algo sencillo, considera una cámara compacta avanzada con un sensor de 1 pulgada.
Asimismo, si estás interesado en la fotografía como hobby o profesión, es el momento de comprar una cámara sin espejo o una DSLR. De ese modo, obtendrás imágenes de alta calidad y podrás familiarizarte con el manejo manual de la cámara. En todo caso, evalúa tus necesidades y las funciones antes descritas, para que puedas elegir la mejor cámara fotográfica.
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